
(PENSANDO. RELIGIOSO O NO. EL ALIENTO ME LLEVO A EL)
A veces sucede que en toda tu vida, se te ha olvidado cerrar la llave, que contiene toda el agua viva de tu ser interno; y te das cuenta, que un día de pronto, ya no sale ésta. Y mas que nada, es porque quieras o no, tienes que cerrar esa llave, y volver a llenarte poco a poco.
Que difícil resulta cuando el yo interno necesita alimento. Y debemos de buscar la forma, para que todo lo que haya allá dentro, se nutra y florezca nuevamente.
Las esencias son hermosas, contienen todo nuestro yo, pero hay que cultivarlas y cuidarlas. Muchas veces la dejamos caer en manos equivocadas, y nos dañan, lastimándonos, o cambiándonos a algo q realmente no somos.
Como seres vivos, necesitamos el cariño y cuidado necesario para poder crecer y florecer, como hermosos seres.
El abono ya está siendo puesto, el cuidado se procura. Ahora solo esperemos que los buenos tiempos, vean como la sabia que da vida llegue nuevamente a nuestro ser.
Como DIOS, con toda su grandeza, nos acaricia, y nos provee de esa sabia, de esa agua viva, que aunque ya no había, Él nos regala nuevamente. Nos inyecta, para que día a día resurjamos poco a poco. Y seamos esa gotita de agua viva, en todo ese océano que es el mundo, y esta a su servicio.
Todo me lleva a ti, mis alegrias, fracasos y sentimientos. Todo lo bello, mi sentir, al fin de cuentas, solo es el.
Cuando caes y tocas fondo, te das cuenta de la grandeza, y los limites que el mismo te pone. Y te dice hasta donde tienes que llegar. Te eleva, baja, crea y destruye, pero siempre para formarte como mejor ser. Cuando algo ya no va de su mano, elimina ese pedazo de vida que hay en ti, lo pasa por su fuego, para hacerte mejor, porque necesita que seas mejor.